Absurdo.

Y llega un día en el que uno dice... ¿y si me edito yo el disco?

Porque, que coño, los sellos y managers están acojonados y no quieren hacer inversiones en artistas nuevos, y ves que tu disco coge polvo en el armario, y te subes por las paredes de sentirte secuestrado por un mal momento del mercado y la industria...

¡BASTA! Me edito yo el disco y punto.

Después de un día de gestiones y llamadas descubres que para fabricarlo tienes que tener una licencia de Sgae, que me cobra a mi para pagarme a mi unos derechos de mi disco, que he grabado y pagado yo (llevándose su porcentaje de gestión, claro está). También necesitas un código que va incrustado en el cd, para que se sepa de quién es y quién pertenece, y para que me lo den tienes que pagar a tal entidad de gestión de los códigos, y para regalarlo en intertnet tengo que firmar una declaración de que no voy a obtener beneficio económico (en que estaría pensando yo, ganar dinero con mi música) para que el departamento digital de Sgae me de permiso para regalar mi disco en mi web.

Por supuesto puedo no hacer nada de esto, y entonces el disco no es "legal", no existe.

Y yo pienso, yo lo he compuesto, lo he grabado, producido, pagado... ¿Quién es toda está gente y qué quieren de mi?

Jejeje... Y te das cuenta que es todo tan absurdo.